Cuando interactuamos con un asistente virtual, le pedimos a un chatbot que resuma un documento o utilizamos un modelo de IA para generar texto, hay un elemento esencial que pasa desapercibido para la mayoría: la ventana de contexto. Este concepto es clave para entender cómo funciona la inteligencia artificial que usamos cada día y por qué, a veces, parece «olvidar» parte de lo que hemos dicho.