El Panel de Control ha sido uno de los componentes
esenciales de Windows durante décadas. La herramienta, que permite
configurar el sistema y gestionar el hardware y software, perdió
relevancia tras la llegada de Windows 10 y está en proceso de volverse
obsoleta. Si bien el Panel de Control no se actualiza desde hace meses,
un nuevo reporte deja entrever que Microsoft alteró una de sus funciones clave.